La Policía de Investigaciones de Chile (PDI), encargada de la investigación criminal y científica en el país, enfrenta una limitación crítica: la falta de herramientas tecnológicas portátiles que permitan identificar en el lugar del crimen rastros de sangre o residuos de disparo con precisión. Esta carencia retrasa la toma de decisiones en los momentos clave, genera cuellos de botella en la cadena investigativa y reduce la eficiencia del sistema judicial.
Actualmente, el levantamiento de evidencias biológicas y balísticas depende de métodos manuales y análisis en laboratorios que pueden tardar días o incluso semanas. Esto impide confirmar hipótesis tempranas, compromete la integridad de la escena del crimen y dificulta la recolección de pruebas fundamentales para avanzar en las investigaciones.
Con más del 50% de los homicidios en Chile involucrando armas de fuego, la posibilidad de detectar residuos de disparo y manchas de sangre de forma rápida, precisa y no invasiva resulta clave para fortalecer la persecución penal. Además, la PDI requiere que estas soluciones puedan ser utilizadas directamente por los equipos en terreno, resistiendo condiciones climáticas variables y sin depender de conectividad permanente.
Este desafío busca una solución tecnológica portátil que permita a los peritos y detectives de la policía levantar evidencia crítica directamente en la escena del crimen. La solución deberá ser precisa, confiable, de fácil uso, con autonomía energética adecuada y validada tanto en laboratorios como en contextos operativos reales. El objetivo es transformar la forma en que se lleva a cabo el trabajo forense en Chile, agilizando las investigaciones y fortaleciendo el sistema de justicia criminal.
“La imposibilidad de contar con resultados confiables en terreno dificulta la toma rápida de decisiones por parte de detectives y fiscales.”
“En Chile, el 52,9% de las víctimas de homicidio fue agredida con arma de fuego.”
“La falta de técnicas robustas para la identificación de residuos de disparo afecta la eficiencia de la persecución penal.”
Limitada capacidad para levantar evidencia balística y biológica directamente en terreno.
Diseñar equipos portátiles que permitan identificar sangre y residuos de disparo en la escena del crimen con alta precisión.
Etapa 1: $40MM (6 proyectos) – Etapa 2: $80MM (4 proyectos) – Etapa 3: $120MM (2 proyectos)
Prototipo funcional
6
6 meses
$40.000.000
Desarrollar herramientas mínimamente invasivas que identifiquen sangre o residuos balísticos con al menos 80% de precisión sin comprometer la escena del crimen.
Probar prototipos portátiles con resistencia ambiental y autonomía de 6 horas, que operen en condiciones similares a un sitio del suceso real.
Validación operativa
4
6 meses
$80.000.000
Implementación en terreno
2
8 meses
$120.000.000
Equipos portátiles validados en investigaciones reales, capaces de entregar reportes inmediatos y ser integrados a protocolos policiales existentes.